Una serie grandes preguntas que para todos los habitantes de la región suena en el inconciente colectivo, ¿siendo una región tan rica por que estamos tan pobres?, por qué si tenemos una tierra de excelente calidad, cada día son menos los cultivos y más los bosques, qué paso con el otrora fuera llamado el galpón de Chile. Las causas se podrían explicar en agricultura chilena, como la del resto del mundo, ha experimentando cambios significativos producto de un conjunto de transformaciones que dicen relación con procesos de globalización económica, de orden tecnológico y hábitos de consumo; todos estos en función de nuevos patrones demográficos y de ingresos que predominan en los países desarrollados. Así por ejemplo se pueden mencionar, en términos geopolíticos y económicos, aspectos como la nueva situación del este de Europa, la constitución de bloques comerciales, la creciente inserción de Asia en el comercio, las variaciones cíclicas de las economías industriales, el crecimiento del comercio por sobre el de la producción y la búsqueda de presencia en los mercados internacionales por parte de los países en desarrollo.
Son estas transformaciones las que están condicionando la situación presente de nuestra agricultura. Han cambiado las rentabilidades de las distintas opciones productivas y, producto de lo anterior, se transforman los patrones de uso del suelo, orientándose hacia una especialización creciente en función de las ventajas comparativas de los diversos sistemas agroecológicos. Por su parte, el progreso está determinando, producto de su acelerado avance, un gran desarrollo en lo relacionado a la gestión de los recursos productivos, a las relaciones internacionales de comercio, a las técnicas de transformación de los productos y a la comercialización de éstos. En relación a los hábitos de consumo, es necesario mencionar los cambios que está sufriendo la demanda mundial de alimentos en función de factores como la mayor esperanza de vida y la importancia de la salud, provocando una estructura de oferta también distinta.
Todo lo anterior la Concertación lo sabe, la pregunta es por qué las políticas que ha establecido no han fortalecido al sector es más lo han debilitado por la falta de preocupación. Ejemplo de lo anterior : la competencia desleal de productos extranjeros que reciben escandalosas ayudas en sus países de origen, un estado que no neutraliza tales distorsiones generando un enorme daño interno, una política indígena errada que perpetúa la pobreza, el aislamiento y provoca violencia.
Al parecer la arrogancia de la Concertación y sus operadores políticos no ha querido reconocer la virtud quiebra y desaparición de la agricultura de la zona, no le interesa aplicar mecanismos jurídicos eficientes que neutralicen las distorsiones de los mercados, y garantice justicia económica a los miles de campesinos y agricultores chilenos y a todo un sector rural minifundista, mapuche y pobre. Dado los anteriores argumentos se puede deducir que la concertación no tiene la voluntad política de generar cambios sustanciales que solucionen los problemas.
Para la Coalición por el Cambio y Sebastián Piñera, la agricultura es un eje fundamental de Desarrollo, para nuestra Región y país. El compromiso es que Chile se transforme en uno de los 10 países líderes en exportación de alimentos y para lograr eso la agricultura debe tomar un rumbo diferente, que se construya con una visión moderna de país, encuadrada en nuestra realidad, la cual por si misma es la mayor de nuestras fortalezas
Basado en lo anterior el 1º de Diciembre, a las 16.00 horas, en la Medialuna de Chillán los agricultores y campesinos del Sur sostendrán un gran encuentro con Sebastián Piñera En la oportunidad, el candidato de la Coalición dará a conocer medidas claves para recuperar la alicaída agricultura del sur. Invitamos a todos los agricultores interesados a participar en este encuentro en el cual podrán vislumbrar los grandes cambios paradigmáticos que vienen para nuestra agricultura.
Profesionales por el Cambio, renovación Nacional
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